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La compañía de seguros de los conductores culpables de un accidente deben pagar a los lesionados que lo sufren un accidente la indemnización por los daños y lesiones reclamadas por su abogado especializado. Los gastos médicos o los tratamientos para curar las lesiones causadas en el accidente de tráfico se incluyen en esta reclamación, pues son un derecho garantizado por ley. Los daños propios en el vehículo también serán reparados o indemnizados correctamente siempre que elija un abogado especializado para que efectúa eficazmente la reclamación. Cuando el conductor es culpable se pierde el derecho a recibir una indemnización pero los ocupantes de su vehículo siguiente teniendo derecho a reclamar la indemnización correspondiente.
También los peatones, ciclistas, conductores u ocupantes de cualquier tipo de vehículo que no son culpables de un accidente tienen derecho a una indemnización por los daños padecidos, ya sean de naturaleza física (lesiones) o material (objetos personales). Esto conlleva el derecho a la reparación del coche o a recibir un pago por el siniestro del mismo, y a recibir una indemnización por el tiempo de curación de las lesiones y las posibles secuelas que persistan tras el accidente, así como los gastos que haya ocasionado todo el proceso.
Para identificar la autoría y responsabilidad de un accidente las compañías exigen un parte amistoso o el Atestado, donde se especifican los hechos, la hora, el lugar, las matrículas de los vehículos implicados en el accidente, la identificación de los conductores (si tiene lugar, sus ocupantes), testigos, lesiones, etc.
LA DECLARACIÓN AMISTOSA DE ACCIDENTE DE TRÁFICO
Es importante rellenar el parte amistoso de forma correcta pues, aunque parezca una labor sencilla, en el momento de sufrir un accidente la víctima se encuentra en un estado nervioso que puede dificultar el proceso, especialmente si no ha visto uno anteriormente. Por tanto es importante conocer de antemano como es, lo que se debe rellanar y familiarizarse con los datos y términos que se exigen (datos personales, matrícula, compañía, teléfono del conductor, lugar del accidente, daños materiales ocasionados).
EL ATESTADO POLICIAL
Cuando llega al lugar del accidente la Guardia Civil o la Policía Local los conductores implicados deben ayudar a señalizar el siniestro de cara a los demás usuarios de la vía para evitar nuevos accidentes o que haya peligro para otras personas. Los conductores, si están de acuerdo con la dinámica del accidente, tienen también que rellenar el parte amistoso y, si fuera necesario, llamar a los servicios médicos (Samur).
Sin embargo, si existe discusión acerca de la dinámica del accidente o han tenido lugar lesiones, los agentes de la autoridad realizan el llamado “Atestado», que podrá ser solicitado por el lesionado, su abogado o la compañía de seguros. En el Atestado se exponen las manifestaciones de las partes implicadas, testigos, daños materiales, estado de la vía y, en determinadas ocasiones, un reportaje fotográfico y un estudio biomecánico que reconstruye el accidente, circunstancia que suele tener lugar cuando el accidente ha sido grave.
LA INDEMNIZACIÓN POR LAS LESIONES OCASIONADAS EN UN ACCIDENTE DE TRÁFICO
El derecho a recibir una indemnización tiene lugar cuando tenemos un accidente y no somos culpables del mismo. La indemnización cubre el tiempo de curación de las lesiones y las posibles secuelas que haya podido ocasionar el accidente. Para saber qué cantidad puede recibir la víctima de un accidente existe un Baremo de tráfico, que refleja en una serie de tablas las lesiones que se indemnizan y su valor en puntos, que luego se transformará en INDEMNIZACIÓN en función de la edad de la víctima y la gravedad de sus secuelas.
Para valorar correctamente las lesiones de acuerdo con el Baremo es necesario interpretar la documentación médica del lesionado por un buen abogado de accidentes de tráfico para defender sus derechos antes las compañías aseguradoras.
Para ello es fundamental tener en cuenta dos puntos importantes para reclamar una indemnización: